FitzGerald basó su idea en parte por la manera que las fuerzas eletromagnéticas eran afectadas por el movimiento; en particular, se aprovechó de las ecuaciones creadas un tiempo antes por su amigo Oliver Heaviside.
El físico holandés Hendrik Lorentz cayó en una idea similar en 1892 y la desarrolló con una conexión más completa con su teoría de los electrones.
[7] FitzGerald era sobrino de George Johnstone Stoney, el físico irlandés que acuñó el término "electrón".
Tras el descubrimiento de las partículas por J. J. Thomson y Walter Kaufmann en 1896, FitzGerald fue quien propuso llamarlas electrones.
En particular, FitzGerald utilizó algunas ecuaciones que habían sido derivadas poco antes por su amigo el ingeniero eléctrico Oliver Heaviside.
FitzGerald, al igual que otros a finales del siglo XIX, se obsesionó con el deseo de volar.
FitzGerald se quitó el abrigo en estas ocasiones, pero conservó su sombrero de copa, que era el accesorio normal para un becario en aquella época.