George-Henri Rivière

En 1928, Rivière comisarió su primera muestra de arte americano antiguo en el Museo de las Artes Decorativas y se unió a Paul Rivet como su vicedirector para comenzar la renovación del polvoriento Museo del Trocadero que fue totalmente modernizado, reabierto al público como Musée de l'Homme en 1938.

Ese año también fue responsable de la apertura del Musée National des Arts et Traditions Populaires, basado en las colecciones etnográficas del museo Trocadéro.

Orientado hacia la educación pública, su programa de colecciones y exposiciones se centró en las formas populares de arte tradicional, con una orientación cietífica e investigadora mediante la creación del Centre d'Ethnologie Française, inaugurado poco después de la Segunda Guerra Mundial.

Entre 1948 y 1965, Georges-Henri Rivière fue el primer director interino del ICOM, el Consejo Internacional de Museos, al que regresó como Asesor Permanente en 1968.

Ampliamente acreditado por la introducción del concepto del ecomuseo, que intenta retratar a las civilizaciones en sus entornos naturales, fue uno de los empresarios museológicos más apreciados en la Francia moderna.