A partir de ese momento iría sustituyendo al maestro en sus funciones y componiendo para diversas ocasiones.
La capilla de música llevaba mayormente en sus manos desde hacía nueve años y estaba bien dotada.
A pesar de ello, comenzó su magisterio solicitando oposiciones para los puestos de sochantre, tiple y contralto, que se realizaron tres meses después.
Parece que el maestro se arrepintió de su comportamiento y el percance quedó sin consecuencias.
Las actas capitulares mencionan en diversas ocasiones composiciones del maestro, por lo que tuvo que tener una ingente producción, pero no han llegado a nuestros días.