Galvesaurus herreroi

Determinaron que el sitio sería importante para la investigación paleontológica y, después de obtener los permisos necesarios, comenzaron su excavación propia en 1993.

También durante ese tiempo, varios miembros del equipo publicaron informes científicos sobre los huesos que estaban recuperando y en el sitio mismo, aunque se abstuvieron de publicar un nombre formal para el nuevo dinosaurio debido a que los fósiles aún estaban en preparación.

A medida que los huesos estaban preparados y estudiados, el equipo los transfirió al pequeño Museo Paleontológico de Galve para su exhibición.

Los restos encontrados incluyen dos húmeros, la placa esternal, una escápula, un isquion, una vértebra cervical, una dorsal-caudal y 5 caudales, un cheurón y fragmentos de costillas, se encuentra en el Museo Paleontológico de Galve.

Publicaron su propia descripción del saurópodo, que llamaron Galvesaurus herreroi, nótese la falta de la letra o, en la revista Naturaleza Aragonesa.

Si esa fecha fuera correcta, el nombre válido para este dinosaurio sería Galvesaurus herreroi y se atribuiría a Barco et al.

En ningún caso la Comisión contempla la posibilidad de que un investigador pueda definir un taxón sobre la base del mismo material, es decir, del mismo espécimen, como ya lo están estudiando otros investigadores, como ha sido el caso con Galvesaurus.

Según Barco y Canudo, el museo agregó una placa a la exhibición de fósiles con su nombre original, pero incluyó un error ortográfico inadvertido, con la "o" adicional.

Vulcanodon Shunosaurus Barapasaurus Patagosaurus Mamenchisauridae Cetiosauridae Losillasaurus Turiasaurus Rebbachisauridae Diplodocidae Dicraeosauridae Lourinhasaurus Jobaria Haplocanthosaurus Camarasaurus Galvesaurus Phuwiangosaurus Aragosaurus Tastavinsaurus Venenosaurus Brachiosauridae Euhelopus Titanosauria En la Formación Villar del Arzobispo, además de los restos de esta especie, han sido hallados huesos e icnitas de otros saurópodos, terópodos y ornitópodos.

Recreación de Galvesaurus