La teoría dice que con la aparición de cantantes que rompían los estereotipos de piel pálida y natural cabello negro japoneses, mediante su aparición con plataformas, uñas y pestañas postizas, minifaldas, maquillaje perfecto, etc., motivó que las adolescentes empezaran a imitar ese estilo, en la década de 1980 muchas jóvenes japonesas imitaron esa estética atrevida y sexy hasta el punto en que Namie Amuro se convirtió en ídolo para las ganguro, y más adelante Ayumi Hamasaki en lo mismo para las ganjiro.
Esto supuso una revolución, ya que la mujer japonesa siempre ha sido sumisa y obediente.
Muchas tenían empleos bien pagados, pero sin muchas posibilidades, como ascensoristas o dando la bienvenida en grandes almacenes, dado que la mayoría eran muy jóvenes y vivían con sus padres, su sueldo iba íntegramente para comprar en Rocky America, una de las tiendas donde se proveían de vestidos super sofisticados y cortos de diseñadores como Azzedine Alaïa y Thierry Mugler.
En la década de 1990, un libro llamado Speed Tribes le dedica un capítulo a las Bodicon.
Lo mejor es lo que decían las propias bodicon de su estilo "Visto así porque quiero.
También hay revistas específicas para ellas, siendo la EGG la más famosa, además de Popteen, Ranzuki, Ageha y otras.
Suelen escuchar a cantantes como Namie Amuro, Ayumi Hamasaki, Boa, Koda Kumi o Sifow, aunque sus gustos musicales no se limitan al J-pop sino que también escuchan otros géneros.