Las Historietas tienen un inestimable valor para la historia literaria del siglo XVII.
Causó incredulidad en el mejor de los casos e indignación en el peor de ellos, ya que no era esa la imagen que en el siglo XIX se quería proporcionar del Gran Siglo francés.
Muy relacionado con Valentin Conrart, Tallemant des Réaux también fue poeta y, a pesar de que su actual fama tiene su origen en sus Historietas, contribuyó como poeta en la Guirnalda de Julia.
El final de su vida está marcado por los problemas relacionados con la creciente represión contra los hugonotes, que concluiría con el edicto de Fontainebleau.
En 1660, su esposa se convierte al catolicismo antes de retirarse a un convento.