La estatua muestra a un celta moribundo con gran realismo, especialmente en la cara, y es posible que estuviera pintado.
Lord Byron fue uno de aquellos visitantes, conmemorando al Gálata moribundo en su poema Childe Harold's Pilgrimage (canto IV, stanzas 140–141).
Fue copiado extensamente, y muchos reyes, estudiosos y gente poderosa encargaban sus reproducciones del Gálata moribundo (por ejemplo hay una copia en mármol negro en el vestíbulo de Robert Adam en la Casa Syon (Londres).
Los menos pudientes podían adquirir copias de la estatua en miniatura para usarlas como adornos o pisapapeles.
En los Estados Unidos existen copias en la Sociedad Estatal Histórica, en Tacoma, Washington, y en la Biblioteca Redwood de Newport, Rhode Island.