Fredericia casi fue seleccionada como la capital danesa, debido a su localización central y su amplio puerto; sin embargo, al final Copenhague retuvo su titularidad debido a su población masiva.
[2] El ferrocarril llegó a la ciudad en 1866 con la apertura de la línea Fredericia-Vamdrup, y dos años después se inauguró la conexión ferroviaria con Aarhus.
Aunque la ciudad fortificada había ya perdido su relevancia bélica, sólo hasta 1909, cuando su interior daba muestras de hacinamiento, se abolió oficialmente su papel defensivo y se permitió la urbanización en el exterior de sus murallas.
El concejo municipal se ha enfocado más, desde los años 1980, a la problemática de la contaminación.
En 1996 se reconoció a la ciudad por sus esfuerzos en favor del medio ambiente.