Fraude de paternidad

En el caso del fraude paternal, la atribución errónea es deliberada y no accidental.El fraude de paternidad no es un delito en la mayoría de países como el Reino Unido[3]​en los que la inscripción en tanto que padre, el cuidado de niño y la convivencia durante la concepción pueden dar lugar a que el cónyuge sea reconocido como padre a todos los efectos legales.En Australia, la pareja puede demandar por el dinero invertido en la crianza del niño que se reveló no ser suyo, pero requiere pruebas de la intencionalidad.[5]​En Canadá, la jurisprudencia confirma que una relación suficiente con el niño antes de descubrir el fraude justifica el mantenimiento las responsabilidades paternas.[8]​[9]​ Activistas incluyen Tom Leykis,[10]​ Ned Holstein[11]​ y Glenn Sacks.