Regresó al union con la profesionalidad y jugó para la selección de Croacia.
En 1988 se trasladó a Italia y lo contrató L'Aquila Rugby, única liga profesional entonces, por recomendación de Mike Brewer.
Jugó para Croacia en 1998, por la clasificación para la Copa del Mundo de Gales 1999 y contra la Azzurri.
Era considerado un gran jugador en carrera, por su destreza, velocidad y habilidad de manos.
Su eterna suplencia de Fox, se debió a que aquél era elogiado por ser un pateador superior; así finalmente éste se ganó el favor de los selectores, lo que obligó a Botica a ir al banquillo y restringió la cantidad de pruebas que jugó.