Francmasonería en Uruguay

La sociedad de la Francmasonería tiene una larga historia en el Uruguay, que se inicia a finales del siglo XVIII y ha influido visiblemente en la historia política, social y económica del Uruguay desde sus comienzos.

Buena parte de los fundadores de este país han pertenecido a esta fraternidad, y su visión del mundo se ha plasmado en varios aspectos sociales del país.

La historia de la Masonería en el territorio que hoy corresponde al Uruguay comienza a finales del siglo XVIII con la llegada de nuevos pobladores a la, entonces conocida como, Banda Oriental y su capital Montevideo.

Esta presencia masónica se vio incrementada en 1807 durante las Invasiones Inglesas en el Río de la Plata que trajeron junto con sus tropas, principalmente las divisiones de "Dragones" irlandeses, las logias que casi siempre acompañaban a estas.

Por ejemplo en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado es un rito masónico derivado del sistema político republicano que se practicaba en París a mediados del siglo XVIII.

En el 2008 han existido varias iniciativas fallidas para refundar la masonería llamada especulativa del Rito Egipcio en el Uruguay como el Triángulo "Sar Alden", en 2004 se funda la Logia Ankh em Maat jurisdiccionada al Soberano Santuario Latinoamericano de Chile.

Y es Independiente, pues ella no está atada a ningún interés de grupo, sea ideológico, religioso, o económico.

Cultura democrática: como condición indispensable para fomentar la educación laica del ciudadano.

se ha conformado así, como una sociedad de Francmasonería abierta, liberal y progresista, que propende un nuevo orden mundial, abierta a la construcción de la civilización del futuro.

Integra la Federación Americana de Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo Aceptado (FASCREAA).

Actualmente el Soberano Gran Comendador (Presidente) es Elbio Laxalte Terra,33° Los Grandes Maestros o (Presidentes) del GOFMU desde su fundación han sido: La historia de esta organización masónica en la era moderna esta estrechamente vinculada al proceso político y social vivido en Chile a principios de la década de 1970 en el marco del gobierno socialista y posterior gobierno de facto que vivió aquel país por entonces.

En sus filas se agrupan tanto mujeres como hombres y no exige al aspirante la creencia en un "Gran Arquitecto del Universo" como si lo requieren algunas de las organizaciones masónicas con presencia en el Uruguay.

Son logias "a cubierto" de marcada tendencia esotérica y "operativa".

La escuadra (símbolo de la virtud) y el compás (símbolo de los límites de comportamiento con los que debe mantenerse el masón respecto a cualquier persona, sobre todo respecto a los demás hermanos) son quizá los dos símbolos masónicos más conocidos mundialmente. Aquí aparece también la letra «G», que representa al Gran Arquitecto del Universo.