Superada una grave enfermedad en su juventud, el año 1630 ingresó en los franciscanos conventuales de Nola.
Enseñó filosofía y teología en varias casas de formación: Aversa, Florencia, Ferrara, Bolonia, Roma.
Esto le valió ser catedrático en La Sapienza, donde terminó su Epitome Canonum.
Fue un hombre de vastos conocimientos, profunda piedad, vida austera y sencilla, generosidad para con los pobres.
Lorenzo Brancati de Lauria publicó muchas e importantes obras, entre las que destacan: