[3] Así, fue el heredero del patrimonio familiar.
Francesc, como hicieron su padre y su abuelo, vivió siempre en la villa de Segorbe, y también sería el último al seguir esta tradición.
[1] Sin embargo, a la muerte del duque, la villa de Segorbe presentó un pleito para incorporarse a la corona como villa real, pero finalmente resultó en fracaso el 1619.
[6] Francesc fue enterrado en la catedral de Segorbe, pero posteriormente fue trasladado al Monasterio de Poblet.
[2] Francesc ostentó los siguientes títulos a lo largo de su vida:[2]