En 1970 estudió en la Facoltà di Lettere y en el Istituto d'Arte de Urbino, y al año siguiente en la Accademia Pietro Vannucci de Perugia.
Como arquitecto es autor de diversos edificios públicos y particulares.
[1] Entre sus obras más destacadas figuran varias estatuas en el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona: el Cristo crucificado del baldaquino sobre el altar central (2010), la figura de Santa Escolástica en el ábside (2013) y el grupo escultórico del Sepulcro vacío en el cimacio de la fachada de la Pasión (2018), formado por un ángel y las Tres Marías.
[3] Es autor también de la escultura del Abad Oliba situada en el exterior del Monasterio de Ripoll (2008), así como del Monumento a Eduard Soler (2010), en el mismo municipio.
Otra obra suya es la efigie de Lluís Maria Xirinacs (2011).