Albert siempre destacó por su juego colectivo, por su gran pegada con ambas piernas y por su increíble visión de juego, además de ser un jugador muy deportivo; nunca recibió una tarjeta roja.
Como entrenador, también estuvo solo en un club, el Al-Ahly Benghazi de Libia, pero en dos etapas distintas.
Fue nombrado mejor futbolista europeo del año en 1967, ganando el Balón de Oro.
Con la selección de su país disputó varias competiciones internacionales.
[1] También alcanzó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Roma 1960 junto con la selección húngara y jugó 2 mundiales, Chile 1962 e Inglaterra 1966.