[1] Las religiones abrahámicas o monoteístas mantienen una concepción lineal del tiempo histórico y la cosmología, en la que el escenario del fin de los tiempos supone una transformación espiritual vinculada a la redención.
[3] San Pablo escribía en la Primera epístola a los corintios (siglo I d. C.) que el «fin de los tiempos» ya había llegado para los cristianos.
[4] En el islam, al día del juicio (Yawm al-Qiyāmah) precederá la aparición del Mahdi montado en un caballo blanco, que con la ayuda de Isa (Jesús) triunfará sobre el falso Mesías (Masih ad-Dajjal).
[5] Otras religiones suelen tener concepciones más cíclicas, con escatologías caracterizadas por la decadencia, la redención y el renacimiento.
[7] En la mitología nórdica la destrucción futura del mundo actual se denomina "crepúsculo de los dioses" (Ragnarök), tras el que el mundo resurgirá nuevo y fértil y será repoblado por los dos humanos supervivientes.