A ello se añade la imprecisión en la atribución de las distintas obras así como en el número exacto de Filóstratos, que oscila entre dos y cinco.
La cuestión dista de estar resuelta definitivamente.
[1] Probablemente hijo de sofista, dada la transmisión frecuente de dicha actividad en esa época entre padres e hijos.
Debió colaborar en sus trabajos desde comienzos del siglo III, siendo precisamente la Vida de Apolonio un encargo en vida de la emperatriz.
[3] Se le atribuyen asimismo el Heroico, unas Cartas, un Gimnástico y unos Cuadros.