[2] En 1907 con 23 años y sus estudios terminados, emigró a Argentina y después de una corta estadía en Buenos Aires, en donde dio conciertos de violín en la Asociación Wagneriana de Buenos Aires, se radicó en Mendoza, en 1908.
El artista le interesaban los elementos que dirán cuenta del ambiente mendocino así pinto en localidades rurales icónicas de esta provincia como Chacras de Coria y zona de Bermejo.
La muestra fue visitada por escuelas que recibieron la guía de su esposa.
Otra obra que se destaca en esta época fue El regreso de San Martín en la cumbre del Portillo.
Su prolífica labor pictórica debió ser suspendida a partir de 1952 debido a su pérdida gradual de la visión.