En abril de 1934 fundó la organización Ezquerra Vasca Federal, activa únicamente en Guipúzcoa.
Su actitud pudo deberse a que se encontraba enfermo en aquellos precisos días.
En 1939, tras la caída de Barcelona y perdida la guerra partió al exilio.
En 1945 firmó el Pacto de Bayona, en nombre del Partido Republicano Federal, con otras organizaciones políticas y sindicales vascas, reconociendo todas ellas la legitimidad del Gobierno de Euzkadi en el exilio.
Aunque le dieron el alta, su posterior evolución indica que nunca llegó a restablecerse.
Sus problemas económicos y de depresión le hacen finalmente regresar a España en 1950.