Según la Ilíada, Fénix (en griego antiguo Φοῖνιξ / Phoĩnix, gen.
Celosa su madre de Clitia o Ftía (una concubina de su padre), instigó al muchacho a seducirla.
Al descubrirlo Amíntor, cegó a Fénix.
Se refugia en la corte de Peleo, y este monarca lo envía con el centauro Quirón, que le devuelve la vista y posteriormente Peleo le hace rey de los dólopes.
Con Neoptólemo emprende el regreso desde Troya, pero muere en el camino.