[2][3][4] Por su parte Argentina le entregó a Chile el 18 de septiembre de ese año un palacio en la calle Esmeralda, en Buenos Aires.
[4] El lugar donde se ubicaba era el límite de la ciudad, ubicándose en sus cercanías el Hospital de San Borja y la estación Providencia del Ferrocarril de Circunvalación.
[2][3][4] El alcalde de la ciudad ofreció a la delegación argentina ocupar el Palacio Cousiño o el Club Militar, sin embargo decidieron ocupar momentáneamente el Hotel Carrera.
[4] El gobierno de Chile, a través del Ministerio de Obras Públicas, se hizo cargo de la reconstrucción, llamando a un concurso público que fue ganado por los arquitectos Alfredo Johnson y Carlos Feuersein.
Su fachada poniente destaca por grandes ventanales, y contiguo al salón comedor se ubica una terraza.