[1] Mostró genuino interés en la vida y obra del joven Rubén Darío a quien nombró como Cónsul de Nicaragua en Valparaíso durante su estancia en Chile.
Fue hijo de Lorenzo Carazo Alvarado y María del Rosario Aranda Muñoz.
Estuvo casado con Engracia Hurtado, con quien tuvo cinco hijos llamados Evaristo, Manuel Antonio, Ernesto, Dolores y Maria Benita.
Además de estimular el cultivo del café, impulsó la ganadería.
Durante su mandato, con relación al ejército no se realizaron cambios significativos, más bien Carazo guardó distancia de los asuntos militares.