En el siglo xx, el estilo se aplicó de manera superficial, al igual que el neogótico, a rascacielos.
La fachada es similar a un acantilado, sin ningún pórtico ni frontón que sobresalga mucho.
Las esquinas de los ejemplos de principios del siglo xix habitualmente tienen sillares y, en los edificios del siglo xx, hay a menudo cierto énfasis que da una mayor fuerza visual a las esquinas.
Salvo en algunos ejemplos posmodernos, siempre hay un énfasis en la cornisa, que puede ser muy grande y sobresalir hacia la calle.
Los primeros palazzi datan de la época románica y gótica, pero el estilo definitivo data de una época que empezó en el siglo xv, cuando muchas familias nobles se habían enriquecido con el comercio.
Algunos ejemplos famosos son el Palazzo Medici-Riccardi, construido por Michelozzo di Bartolomeo en Florencia, el Palazzo Farnese, construido por Antonio da Sangallo el Joven y completado por Miguel Ángel en Roma, y la Ca' Vendramin Calergi de Mauro Codussi y el Palazzo Corner della Ca' Granda de Jacopo Sansovino, ambas en el Gran Canal de Venecia.
En 1829 Barry inició la arquitectura neorrenacentista en Inglaterra con su diseño en estilo palazzo del Travellers Club, en Pall Mall.
[4] Después de Charles Barry, el estilo palazzo fue adoptado para usos diferentes, particularmente para la banca.
[3] Un importante arquitecto del siglo xix que trabajó ampliamente en el estilo palazzo fue Edmund Blacket.
El estilo palazzo encontró una mayor adopción a finales del siglo xix, cuando se adaptó para su uso en edificios comerciales y de oficinas.
Henry Hobson Richardson diseñó varios edificios usando la forma de palazzo, destacables por usar el estilo neorrománico italiano en lugar del renacentista.
La arquitectura de estilo palazzo siguió siendo frecuente para diseñar grandes almacenes durante la primera mitad del siglo xx, a veces con detalles art déco.
La arquitectura posmoderna ha visto un cierto resurgimiento del estilo palazzo, con formas muy simplificadas y eclécticas.