Esteban de Arteaga

[1]​ No llegó a tomar órdenes sagradas porque tuvo que interrumpir sus estudios al ser expulsados los jesuitas de España; así que debe considerársele abate y no sacerdote, como por error se suele repetir a menudo.Estuvo un tiempo con sus compañeros en Córcega y dos años después abandonó la orden para poder regresar a España, pero no se le concedió permiso y vivió desterrado hasta su muerte.Allí entró en contacto con los musicólogos Giovanni Battista Martini y Antonio Eximeno, e investigó la evolución del teatro musical italiano, publicando Le rivoluzioni del teatro musicale italiano, "La revolución del teatro musical italiano" (Bolonia, 1783), que alcanzó un gran éxito y le hizo conocido a escala europea.Arteaga propugna unificar poesía y música, escenificación y pantomima en un todo armónico que conduzca a la creación de un espectáculo sintético de todas las bellas artes.Acompañó a Azara en sus viajes y, cuando el papa fue desterrado, marcharon a París, donde le sorprendió la muerte el 30 de octubre de 1799.