Formaba parte del ferrocarril de Tharsis, que estuvo operativo entre 1871 y 1999.
En la actualidad las instalaciones se encuentran clausuradas y fuera de servicio.
La construcción corrió a cargo de la Tharsis Sulphur and Copper Company Limited, empresa de capital británico que poseía varias minas en la zona y buscaba dar salida al mineral extraído.
La vía general entre Tharsis y Corrales fue clausurada al tráfico el 1 de enero de 2000, si bien el último tren había circulado una semana antes.
En la actualidad la estación dispone de dos vías de servicio y un andén, constituyendo de facto la estación terminal del trazado ferroviario que ha sido preservado.