[1]En sus últimos años la decadencia que sufrió la llevó de ser una de las estaciones más completas del ferrocarril y con más movimientos, a convertirse en un embarcadero con pocos servicios y población a la que servir.
Con la llegada del tren el pueblo atrajo un gran movimiento de carreros que enviaban sus cargas hasta Comodoro.
Para los años veinte el pueblo vivió su apogeo; fue así que en 1926 contó con alrededor de 250 habitantes.
El pueblo vio su máximo desarrollo hacia 1930 como proveedor de la zona rural adyacente.
La localidad recibió un fuerte impulso gracias al ferrocarril, que con sus movimientos de cargas y pasajeros le dio a este pueblo una gran prosperidad, incluso compitiendo con la economía de la vecina Comodoro Rivadavia y superando a Sarmiento.
Hoy en día esto hace que su cementerio este lleno, en su mayoría, de asesinados.
[8] Para los años 1990 las estaciones y apeaderos del ferrocarril tenían sus instalaciones aun conservadas.
Gracias a su tamaño y población que tuvo el pueblo, se podía encontrar diversas antigüedades.
Lamentablemente, la industria petrolera alteró las condiciones y el más grande de los basurales históricos se fue perdiendo.
[10] Sólo queda en pie el antiguo edificio de las cuadrillas del ferrocarril, un aljibe ferroviario en ruinas y el cementerio, donde se cuentan aproximadamente 50 tumbas con sus lápidas lavadas por el viento.
[12] Actualmente se halla destruida por el paso del tiempo y el desguace vandálico que particulares le infringieron ante el abandono de la localidad.
[13] El pueblo volvió a la memoria con el trabajo del Licenciado Aguado, que con su investigación plasmada en el libro "Cañadón Lagarto.
De este modo, todo lo que fue el pueblo es conocido como un área petrolera en producción con su nombre original.
Desde 1938 el itinerario expuso por primera vez una extensa red servicio suburbano que recorría la zona norte de Comodoro.
A pesar de que Cañadón Lagarto ya estaba casi sin población la estación se mantuvo activa.
Las condiciones siguieron iguales en el viaje de larga distancia para pasajeros como en el itinerario anterior.
De este modo, el ferrobús solo se detenía en Cañadón Lagarto si habían pasajeros a servir.
Por otro lado, el viaje de pasajeros operado por los ferrobuses a Sarmiento desde las 7hs siguió mostró la sería retracción desde Estación Pampa del Castillo hasta Sarmiento todos los puntos se mostraron como paradas optativas.
Sin embargo, en el otro viaje que partía desde las 9 hs la cantidad de elementos optativos era sensiblemente menor.
No obstante, pese a perder Escalante el servicio suburbano; el ferrocarril ideó en los domingos un viaje especial.
Esto daba lugar que los visitantes permanecieran buena parte del día disfrutando en los diferentes destinos seleccionados.
En los otros 3 viajes: lunes, viernes y uno sin especificar por ser diario o condicional quizás; el ferrobús siguió considerando esta estación como parada obligatoria en todos sus servicios.
Además, el itinerario mostró que el servicio de pasajero y cargas empeoran levemente los tiempos.
Una extensa colección de boletos confirma a Cañadón Lagarto como punto concurrido.
En este documento se mostró evidente merma, clasificándola como embarcadero para pasajeros y carga.
Fue edificada de espaldas al viento, con dos habitaciones amplias y dos menores a los lados.
Se pueden encontrar otras idénticas con diferente conservación en las estaciones Escalante, Holdich, Valle Hermoso, Parada km 162, Sarmiento y Colhué Huapi.