Aunque se popularizaron sobre todo durante el siglo XIV, el más antiguo conservado, el Ms.
[3] En sus 64 páginas ilustradas se describe un sistema de lucha completo empleando broquel y espada.
Aunque no se conserva ninguna de las obras que escribió directamente, existe una copia de sus enseñanzas transcrita en el manuscrito conocido como Nürnberger Handschrift GNM 3227a, fechado a finales del siglo XIV.
Habitualmente se enseñaban al mismo tiempo métodos de combate con diversas armas: combate sin armas (como el Kampfringen o abrazare), daga (degen, usualmente del tipo rondel), cuchillo largo (como el Messer y el Dussack, que eran más bien espadas cortas), lanza larga, arma de asta, espada larga y espada bastarda (conocida como langes Schwert, spada longa y spadone), y el uso de la armadura de placas (Harnischfechten o armazare), tanto en combate a pie como a caballo.
Algunos Fechtbücher también tenían secciones sobre el uso del escudo de duelo (Stechschild), armas especiales empleadas tan solo en juicio por combate.
En ella, ambos contendientes se atacan separados a una distancia fija, que no pueden variar durante el combate.
El objetivo principal es la forja del carácter, la capacidad de arriesgarse, vencer el propio miedo y soportar el dolor.
Este es el tercer tratado más antiguo sobre artes marciales históricas europeas del que se conserva una copia.
Durante el siglo XVI también se hicieron muy populares los maestros Giacomo di Grassi, Giovanni Dall'Agocchie, Frederico Ghisliero y Vincentio Saviolo.
A partir del siglo XVII la escuela italiana fue dominada totalmente por el estilo desarrollado por Fabris, quien ejerció una tremenda influencia no solo en Italia, sino también en Alemania, donde contribuyó a la extinción de las tradiciones de esgrima alemanas.
La escuela francesa, al promover el uso de un arma más ligera, permitió movimientos más fluidos y elegantes, por lo que fue desplazando progresivamente a las demás entre las clases altas, las únicas que podían dedicar tiempo y dinero al aprendizaje de la esgrima.
A lo largo del siglo XVIII la escuela francesa se convirtió en dominante en Europa, hasta el punto de que Angelo, maestro de origen italiano que enseñaba en Inglaterra, publicó en 1763 su obra cumbre, L'Ecole des Armes, en francés.
El texto de Angelo fue tan influyente que fue el elegido por Denis Diderot para ser incluido en L'Encyclopédie bajo el epígrafe "Éscrime" (esgrima).
Como sistema de combate, estaba muy integrado con un ideal moral, intelectual y filosófico que debía ser cumplido por parte del practicante.
Estos ideales más estéticos favorecieron que, durante todo el periodo posterior, y hasta el siglo XVIII, las distintas formas de artes marciales occidentales, eminentemente prácticas, fueran desapareciendo, quedando el panorama totalmente dominado por la escuela francesa.
A lo largo del siglo XIX la esgrima se convirtió en una actividad puramente deportiva.
Actualmente la esgrima es un deporte olímpico reglamentado, con un estilo bien definido y multitud de practicantes en todo el mundo.
En Italia, Jacopo Gelli y Francesco Novati publicaron una edición en facsímil del Flos Duellatorum de Fiore dei Liberi, y Giuseppe Cerri publicó un libro acerca del bastone, inspirado directamente en las obras sobre espada a dos manos de Achille Marozzo.
En 1972, James Jackson publicó el libro Three Elizabethan Manuals of Fence, en el que se reeditaban tres manuales de George Silver, Giacomo di Grassi y Vincentio Saviolo.