Pero por lo general aúna diferentes modelos teóricos de corte constructivo a través de diferentes ejercicios interdisciplinarios e integrando a todo el alumnado en dichas actividades, creando una verdadera comunidad educativa.En este tipo de centros, normalmente las relacionen suelen ser amplias e intensas ya que el número de profesores, alumnado y padres y madres es muy recudico, lo cual facilita este hecho.El alumnado de mayor edad puede actuar como un “segundo” profesor inculcándole responsabilidad y autoestima.Por el motivo ya mencionado con anterioridad del escaso número de alumnos, esto permite al profesorado realizar clases en la que el alumnado tenga una participación mucho más activa respecto a un CEIP.Un claro ejemplo basado en una experiencia real es el siguiente: Yo quiero que vengan más niños a la escuela porque hay pocos chicos y casi no hay papas para jugar, solo podemos ser mamas, tías, hijas o niñeras.En algunos casos la convivencia entre alumnos de diferentes edades es beneficiosa para ellos pero en otros, la convivencia puede afectar ya que los más pequeños pueden imitar el mal comportamiento de los más mayores siendo este un gran problema para los docentes.