Para nada, ya que gracias a su carrera cimentó los primeros pasos de sus futuros éxitos como entrenador.
En las filas del Rapid logró cinco Ligas austriacas, aparte de una Copa Mitropa.
Posteriormente jugó en el Racing Club de París, aunque solamente duró dos años, pero siguió demostrando su calidad en cancha.
Primero fue el ADO Den Haag, dándole hasta ahora, su gran logro nacional: la Copa de los Países Bajos.
Posteriormente le siguieron Carlo Ancelotti, Ottmar Hitzfeld, José Mourinho, Jupp Heynckes y Josep Guardiola.
En 1992, año de su fallecimiento, el Praterstadion se pasó a llamar Ernst Happel Stadion.