Más tarde, bajo el amparo de la Cofradía de Nuestra Señora de la Misericordia, comenzó a atender y auxiliar a los reos sentenciados a muerte, hasta el siglo XIX.
Una vez eran ajusticiados, la cofradía era la encargada de recoger el cadáver y darle un entierro en la capilla.
A mediados de ese mismo siglo su uso vuelve a cambiar, y es utilizada como cine parroquial del Colegio de San José, hasta que más tarde durante los años 70 se establece en ella una imprenta.
Actualmente, siendo propiedad de la diócesis de Salamanca, la institución eclesiástica ha llegado a un acuerdo de alquiler con una gestora que mantendrá la imagen del edificio, pero su usó será destinado a apartamentos turísticos.
Contaba con una espadaña churrigueresca, que fue añadida a finales del siglo XVII- principios del XVIII, aunque en 1916 fue trasladada a la iglesia Vieja de Pizarrales.