Los contornos tonales en las sílabas tónicas se llaman acentos tonales y los contornos asociados a los límites de oración se llaman tonos de frontera en la teoría métrica autosegmental.
La entonación de una oración enunciativa sin topicalización del español empieza en tono alto o ascendente, presentará variaciones en ciertas sílabas tónicas y hacia el final dependiendo de la modalidad que se adopte, terminará de forma ascendente (oraciones interrogativas) o descendente (oraciones enunciativas).
Un ejemplo de contorno oracional típico del español en una oración enunciativa no marcada (sin topicalización) sería: Es decir el primer acento prenuclear es B*A, el acento nuclear (versalita) es BA* y el final de la oración tiende a tono bajo (B%).
El acento nuclear BA* del español tiene una fuerte tendencia a ser fijo (aunque puede aparecer en otras posiciones) y estar al final de la oración (a diferencia de lenguas como el inglés y otras lenguas germánicas occidentales).
La fijeza del acento nuclear del español está compensada por la flexibilidad del orden sintáctico en español, algunos órdenes sintácticos en que el verbo aparece frente al sujeto se explican, por el intento del hablante de dejar el sujeto al final para que reciba el acento nuclear: Frente a órdenes marcados o con topicalización como: Esto contrasta con los hechos en inglés, donde el orden sintáctico es muy rígido pero en contrapartida el acento nuclear es más variable y puede señalar un determinado constituyente aunque no esté al final de la oración.