Ingresó seguidamente en la Facultad de Medicina.
En 1879 junto a Manuel T. Podestá y a Carlos Villar dirigió la Revista de Ciencias, Artes y Letras , medio en el que colaborarían habitualmente figuras de la época como Bartolomé Mitre, Domingo Faustino Sarmiento, Guillermo Rawson y José Manuel Estrada.
En 1880, año de la revolución que enfrentó a la provincia de Buenos Aires con el gobierno nacional, se desempeñó como diputado a la legislatura bonaerense.
Especializado en hidroterapia, escribió varios ensayos.
Su obra más destacada en la materia fue Aguas Minerales, especialmente de la República Argentina (1910).