Enrique Casas

Estaba casado con Bárbara Dührkop, que fue más tarde eurodiputada española, con quien tenía cuatro hijos: Daniel, Cristina, Andreas y Richard.

[6]​ El asesinato, cometido en plena campaña electoral, tres días antes de las elecciones al Parlamento Vasco, en las que Enrique Casas era cabeza de lista por Guipúzcoa, provocó una fuerte convulsión política; todos los partidos suspendieron de inmediato sus actos electorales —a excepción de Auzolan, aunque también lo condenara—[7]​ y se convocó una huelga general.

[12]​ Como consecuencia de estas acciones policiales, los CAA quedarían prácticamente disueltos.

[5]​ En 1985 José Luis Merino Quijano fue condenado por la Audiencia Nacional a 53 años de prisión, de los que cumplió diecisiete,[13]​ siendo puesto en libertad en 2001.

[14]​ Rosa María Jimeno permaneció en prisión algo más de tres años.