10 años después, en 1914 Luis Gamero Cívico, nacido en Sevilla, le compra el grueso de la ganadería a Fernando Parladé, compuesto por una punta de reses.
En 1925 sus herederos venden la ganadería a cuatro propietarios nuevos.
[4][5][6] Los Gamero-Cívico se reservaron una pequeña porción la cual llegó a formar parte de Torrestrella.
Este encaste se puede dividir en tres líneas: la primera correspondiente a Samuel Flores y la principal del encaste, y las otras dos son las correspondientes a la línea Clairac y línea Guardiola Soto (Murteira Grave).
[7][8] Suelen frecuentar los ejemplares con grandes cornamentas, abiertas, veletas, acapachadas, astifinas y gruesas de cepa.