Elena Izcue

Debido a las condiciones, ambas debieron trabajar desde muy jóvenes dedicándose a la docencia, y durante toda su vida trabajaron juntas en los proyectos más importantes de la carrera de ambas.

En la publicación La Escuela Moderna de 1914, diseña la carátula empleando elementos precolombinos.

Por su labor, el Presidente Augusto B. Leguía le otorgó una beca de estudios a París, y al año siguiente, ambas hermanas estudian a Fernand Léger, Jean Darúa, Cromaire, entre otros.

[4]​ Parte del interés hacia estas manifestaciones del arte no occidental se debía a una corriente en el arte europeo surgida a inicios del siglo XX conocida como primitivismo, que promovía el uso de formas exóticas, provenientes de la tradición visual de distintas culturas "foráneas" a los centros artísticos hegemónicos europeos.

En el Perú, su iniciativa no estaba sola debido a que el Indigenismo en política y en cultura empezaba a tener un mayor arraigo en los círculos de intelectuales peruanos y en la población en general.