El juicio de Salomón es un cuadro pintado por el maestro italiano del Renacimiento Giorgione (1500-1501).
La decisión de Salomón de cortar al niño en dos y dar una mitad a cada una puso al descubierto a la que fingía serlo.
[1] Detrás de los personajes se encuentran dos grandes robles que dividen el cuadro en dos partes.
La pintura manifiesta algunos rasgos propios del autor, como la ropa lujosa, reflejo del modo de vida burgués y los contrastes de luces y sombras.
[2] El tema es muy representado en la Historia del arte, como puede verse en los siguientes ejemplos:[3]