El Longitudinal
Su primer cronista, don Florencio Pavez Rojas, pasó a ocupar el cargo de director en los primeros días de 1916, por haberse retirado el señor Barrera.Colaboraban en las tareas del diario, con relativa frecuencia, entre otros, los señores Daniel González Dávila (quien poseía el seudónimo de "Clarín de Guerra"), David Rojas González, Guillermo Rencoret Bezanilla, Federico Smith, "Gonzalo Jarquez Erie" (seudónimo de Edmundo Jorquera), Alfredo Vega V., Tomás Ernesto Véliz Jeraldo, Hernando Allard Píderit, Carlos Ahumada ("Punto de Mira"), Pedro Pavez Rojas ("Polígono"), y Armando Araya M., los 6 últimos llevando las noticias del día.El administrador del diario era don Luis Rivera Esquivel, mientras que el propietario del diario, para 1919, era el señor Enrique Delpiano, a quien se le debe la confianza que depositaron en su medio las casas comerciales de la época, para realizar su publicidad.En las semanas anteriores a su cierre, las oficinas y talleres del periódico, ubicados en Garriga 345, habían sido asaltadas y atacadas en varias ocasiones desde el 2 de octubre, y con su ataque más grave el 3 de noviembre, cuando se hizo detonar un cartucho de dinamita en el interior del taller, dejando daños de consideración.[4] Debido a esto, la Biblioteca Nacional de Chile digitalizó completamente la colección existente en sus archivos y la publicó en internet en julio de 2016.