Guillermo Eizaguirre
Debutó en el Sevilla FC en la temporada 1924-25, y abandonó su carrera futbolística en 1936, con el inicio de la Guerra civil, en la que participó como oficial de la Legión junto al bando sublevado.[1] Guardameta elegante y espectacular, sus felinas estiradas para capturar los más difíciles balones le otorgaron el apodo del ángel volador.Al Sevilla llega el interés de grandes equipos, en una ocasión la directiva consigue retener a Eizaguirre comprándole un automóvil deportivo “Amilcar”, aunque el jugador quería una Harley Davidson los directivos sevillistas temían por su integridad.Fue tres veces internacional con España, hecho nada desdeñable, ya que competía por la portería de la Selección con el mítico Ricardo Zamora.Más tarde, una vez retirado del fútbol en activo, fue seleccionador nacional en dos ocasiones, desde 1948 hasta 1956.