Contó con la asesoría de Le Corbusier, quien se desplazó hasta el Brasil en varias ocasiones durante el proyecto.
[5] Éste solicitará la consultoría del renombrado arquitecto francés Le Corbusier, quien se desplazará un mes a Brasil para colaborar en el proyecto.
[4] Ese mismo año se inician las obras, que cuya dirección abandona en 1939 Lúcio Costa, siendo sustituido por Oscar Niemeyer.
[2] Durante el proceso de diseño Le Corbusier solicitó en vano un terreno más amplio para la realización del proyecto.
A raíz de este edificio, ambos elementos ganarían en popularidad en la arquitectura brasileña posterior.