En sus inicios trabajó con Gregori Warchavchik, un emigrado ruso que introdujo la arquitectura racionalista en Brasil.
En 1935 formó parte del equipo encargado de la construcción del nuevo Ministerio de Educación y Salud en Río de Janeiro, junto con Lúcio Costa, Oscar Niemeyer, Affonso Eduardo Reidy, Jorge Machado Moreira y Ernâni Vasconcelos.
Contaron también con el asesoramiento del arquitecto francés Le Corbusier, que pasó tres semanas en el país en 1936 y dejó su impronta en algunas características del nuevo edificio, como la utilización del brise-soleil.
[1] Con Ernâni Vasconcelos construyó en 1937 el colegio Pedro II en Río de Janeiro.
Otras obras suyas fueron: la casa de su madre en Río de Janeiro (1934) y sus llamadas «casas brasileñas», como Héloi Fraga (1951) y Homero Silva (1956) en Río de Janeiro, que combinaban la modernidad con la arquitectura tradicional brasileña.