Posteriormente cruzó Panamá, Colombia y Venezuela, para finalmente concluir con la puesta de sol sobre el océano Atlántico.
El primer borde de la Luna que ocultó al Sol fue el izquierdo, para los observadores del hemisferio norte terrestre.
[3] El eclipse va progresando gradualmente y unos 15 minutos antes de la totalidad, el cielo se volvió extrañamente oscuro.
En el primer y segundo minuto previo a la totalidad aparecieron las "sombras volantes", franjas de luz y sombra que se observaron desplazarse sobre las superficies planas.
Los lugares óptimos de observación fueron Puerto Escondido y San Lorenzo.