La sede tiene una temperatura media anual de 22,6 °C, e en la cobertura predomina la mata.
Su versión etimológica es que el nombre hace referencia a una planta ornamental del mismo nombre, de hojas amarillas y perteneciente a la familia de las liliáceas.
[3] El municipio cuenta con una importante tradición cultural, que abarca desde el artesanado hasta el teatro, la música y el deporte.
Cuenta con varios puntos de interés turístico, como la iglesia matriz y la Plaza Arthur Pagnozzi.
[10] En la ciudad están presentes las más diversas creencias evangélicas, principalmente pentecostales, incluidas las Asambleas de Dios de Brasil (la iglesia evangélica más grande del país),[11][12] Congregación Cristiana,[13] entre otras.