Domingo Sangriento (1920)

Las fuerzas armadas de la república, el antiguo Ejército Republicano Irlandés (IRA, Irish Republican Army), inició una guerra de guerrillas contra la policía británica (Royal Irish Constabulary, RIC), sus organizaciones auxiliares y el Ejército Británico, quienes tenían la determinación de acabar con el separatismo irlandés.

El Gobierno Británico respondió formando a sus propias fuerzas paramilitares, los Black and Tans (sobrenombre surgido por la mezcolanza de uniformes), y la División Auxiliar (en inglés, Auxiliary Division, también conocidos como los Auxiliaries o Auxies).

El comportamiento de ambos grupos fue muy polémico por su brutalidad y violencia, no sólo contra los sospechosos de pertenecer al IRA o los prisioneros, sino contra todos los irlandeses en general.

Esta acción trastocó gravemente la Inteligencia Británica en Irlanda, provocando que el resto de la patrulla y algunos otros espías huyeran al castillo de Dublín, y una gran consternación en la administración británica.

Uno de los auxiliares británicos involucrado en el Domingo Sangriento recordaba que lanzaron una moneda al aire para decidir si irían a hacer la masacre en Croke Park o a saquear la calle Sackville (la calle principal de Dublín, ahora llamada Calle O'Connell).

Se dispararon balas para avisar a los hombres requeridos, lo que causó una estampida y escaparon en la confusión.

El periódico The Times ridiculizó la versión de los eventos hecha por el castillo de Dublín, como también lo hizo una delegación del Partido Laborista Británico que visitaba Irlanda en ese momento.

Placa conmemorativa del Domingo Sangriento en Croke Park, Dublín
Estadio de Croke Park