[2] La obra (que, según las fuentes, recibe distintos títulos)[3] fue pintada en 1465 para conmemorar el segundo centenario del nacimiento de Dante.
Se trata de una témpera sobre tela y está en alto, adosada a un muro lateral, en la nave del evangelio.
Representa al poeta florentino en medio de un paisaje evocador de su Divina comedia, libro que lleva abierto en su mano derecha y del que se pueden leer sus tercetos iniciales:
Nel mezzo del cammin di nostra vita mi ritrovai per una selva oscura, ché la diritta via era smarrita.
Ahi quanto a dir qual era è cosa dura esta selva selvaggia e aspra e forte che nel pensier rinova la paura!