Domenico Mustafà

Admitido en la Capilla Sixtina en Roma como miembro del coro en 1848, pronto se hizo famoso por su forma de cantar, su inteligencia y sus dotes como compositor.Calvé, después de escuchar a Mustafá, la describió como extraña, sin sexo, sobrehumana, sobrenatural...En privado, era siempre amable, receptivo y hablador, dado a contar anécdotas humorísticas durante la conversación.Fue director perpetuo de la Capilla Sixtina; no obstante decidió retirarse en 1902 por su avanzada edad.En ese año se hizo público el nombramiento de Lorenzo Perosi como su sucesor para el puesto.