La trayectoria resultante de las partículas dispersas es una hipérbola.
Con ayuda de esta teoría Hans Geiger, Ernest Marsden y Ernest Rutherford llegaron a la conclusión de que la carga positiva y la mayor parte de la masa del átomo debían estar concentradas en un pequeño espacio en el centro del átomo, al contrario del modelo de J.J.
Thomson, en el que la carga positiva del átomo se distribuye de manera homogénea en una esfera (modelo atómico de Thomson).
Al considerar los resultados, Rutherford dijo: «Esto es tan poco probable como si se disparara con un arma a una almohada de algodón, y que la bala rebote».
Este fenómeno físico fue explicado por Ernest Rutherford en 1911.
Con la denominada fórmula de dispersión de Rutherford se calcula la sección eficaz diferencial, la cual da la porción de partículas que llegan a
en donde se describe la probabilidad de que las partículas dispersas incidan en un ángulo sólido
= 2 π s i n ( θ )
En la fórmula se utiliza las siguientes constantes: