Directiva de Tiempo de Trabajo

[7]​ La directiva establece que los Estados miembro de la Unión Europea (UE) que lo deseen pueden autorizar a los trabajadores pactar con sus empresas jornadas semanales por encima de las 48 horas, lo que se conoce como cláusula opt-out.

[4]​ La comisión europea recomendó eliminar la cláusula “opt-out” en 2004, pero algunos Estados miembros como el Reino Unido, Polonia, Malta, Alemania y Austria, querían mantener la cláusula.

Por el contrario, España, Francia, Bélgica y Finlandia, así como todas las organizaciones sindicales europeas se oponían a la cláusula.

La iniciativa fue presentada por Eslovenia a través de su ministra Marjeta Cotman –Estado que ocupaba en ese momento la presidencia de turno del Consejo-.

El Parlamento Europeo, sin embargo, aprobó el "informe Cercas"[8]​ el 17 de diciembre de 2008, -llamado así por haber sido elaborado por el eurodiputado socialista español Alejandro Cercas-, con el que se rechazó la nueva directiva, se fijaron 48 horas como máxima jornada laboral semanal y se eliminaron las cláusulas de no aplicación (opt-out) en un periodo de tres años que mantenían algunos países como el Reino Unido.