En ese mismo año comenzaron a publicarse los primeros resultados del dimercaprol.
El dimercaprol es un agente reductor muy potente y es capaz de reducir la metahemoglobina a hemoglobina.
Los tioles reaccionan con arsenicales trivalentes como la lewisita o el arsenito de sodio para formar tioarsenitos.
Con metales como el mercurio, el oro y el arsénico la combinación debe poseer una elevada estabilidad para que puedan ser excretados fácilmente.
Otros efectos secundarios son náuseas, vómito, cefalea, sensación de ardor en labios, boca y garganta.
Algunas personas sienten ardor en el pene; puede haber excesiva sudoración en frente y manos.
Puede llegar a haber una reducción transitoria del porcentaje de leucocitos polimorfonucleares.
El dimercaprol puede llegar a causar anemia hemolítica en pacientes que son deficientes de la enzima glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6FD).