Como su padre, solía escribir su primer apellido con zeta (Zernadas).
Tomó posesión del curato de Fruíme con 28 años, manteniéndose en la parroquia hasta su muerte.
Fue arcipreste de Posmarcos de Arriba, ganó un premio poético en Murcia, y fomentó en la parroquia el cultivo del maíz.
[2] Después de su muerte se imprimieron en Madrid sus Obras (1778-1781), coleccionadas por sus amigos en siete volúmenes.
[3] Moratín lo sitúa entre los poetas "pedantes" que se enfrentan a los buenos escritores, seguidores de Apolo, que son bombardeados con las obras de los malos escritores entre las que cita las coplas "del cura de Fruime" junto a las de León Marchante, Gerardo Lobo y otros.