Diócesis de Parral

La diócesis de Parral (en latín: Dioecesis Parralensis) es una circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica en México.La diócesis tiene 43 674 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en el estado de Chihuahua en los municipios de (al momento de su erección): Allende, Balleza, Coronado, El Tule, Hidalgo del Parral, Huejotitán, Jiménez, López, Matamoros, Rosario, San Francisco del Oro, Santa Bárbara, Valle de Zaragoza y parte del municipio de Guadalupe y Calvo.Forma parte de la Zona Pastoral Norte.[1]​ En 2021 en la diócesis existían 21 parroquias agrupadas en 3 decanatos: La diócesis fue erigida el 11 de mayo de 1992 con la bula Qui de Ecclesiis del papa Juan Pablo II, obteniendo el territorio de la arquidiócesis de Chihuahua y del vicariato apostólico de Tarahumara (hoy diócesis de Tarahumara).Según el Anuario Pontificio 2022 la diócesis tenía a fines de 2021 un total de 236 460 fieles bautizados.